¿Cuáles son las funciones de la microbiota?

Las actividades beneficiosas del conjunto de bacterias que componen nuestra flora intestinal o microbiota las podemos dividir en funciones metabólicas y protectoras e inmunitarias.

Respecto a las primeras (funciones metabólicas), nuestra microbiota genera nutrientes esenciales como las vitaminas y algunos aminoácidos, disminuyendo así la cantidad que es necesario ingerir. Además, permite aprovechar nutrientes que tomamos en la dieta y que no son digeribles para nuestro organismo. Entre estos nutrientes se encuentran algunos hidratos de carbono de cadena larga, que al ser degradados por nuestra microbiota dan lugar a ácidos grasos de cadena corta. Estas sustancias son un combustible energético importante para el funcionamiento de nuestro metabolismo.

Por otro lado (en cuanto a las funciones protectoras se refiere), la microbiota forma una barrera microbiológica en la propia mucosa intestinal, recubriéndola; lo que frena el asentamiento (no les deja espacio en la mucosa para colocarse ni entrar a su través) de bacterias externas, que pueden ser dañinas. Y, por último, los componentes que forman nuestra microbiota tienen una acción inmunomoduladora; es decir, contribuyen al desarrollo, maduración y mantenimiento del sistema inmunitario.