Fundamentos de la dieta mediterránea ¡Cuida tu alimentación!

Fundamentos de la dieta mediterránea ¡Cuida tu alimentación!

En los países de la cuenca mediterránea comer es un acto fundamental que forma parte de nuestra identidad y cultura. Este modo de vida, estrechamente relacionado con un tipo de alimentación es un ejemplo de alimentación saludable que ofrece múltiples beneficios para nuestra salud y, también favorece el crecimiento de las bacterias intestinales beneficiosas para nuestro organismo.

 

La Dieta Mediterránea está inscrito por la UNESCO como uno de los elementos de la “Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad” La dieta mediterránea se rige por el principio de que se debe comer de manera variada, asentando las bases de qué alimentos se deben ingerir a diario, cuáles se deben tomar semanalmente y cuáles se deben limitar.

Además, según un estudio, (The gut microbial community in metabolic syndrome patients is modified by diet) este modelo de alimentación ayuda a aumentar la población de microorganismos beneficiosos que previenen la aparición de alteraciones microbianas.

Por lo tanto, es importante que interioricemos hábitos propios del estilo de vida mediterráneo y establezcamos una rutina alimenticia saludable. Más en estas fechas, que seguramente, nos hayamos excedido durante las vacaciones y debemos volver a la rutina ¡Anímate con estos consejos de alimentación saludable

Principales aspectos de la dieta mediterránea:  

La dieta mediterránea se fundamenta principalmente en el consumo de productos frescos y está compuesta principalmente por frutas, verduras, legumbres y hortalizas.

  • En la base de la pirámide alimenticia encontramos las cinco raciones diarias de frutas y verduras que aportan gran cantidad de vitaminas y fibra. El poder antioxidante de estos alimentos nos ayuda a prevenir enfermedades como la diabetes o las enfermedades cardiovasculares.
  • Uno de los ingredientes estrella de la dieta mediterránea es el aceite de oliva. El aceite de oliva es rico vitaminas y ácidos grasos monoinsaturados lo que favorece a nuestra salud cardiovascular.
  • Los cereales integrales en forma de pasta, arroz o pan supone un aporte saludable y fundamental de carbohidratos que nos proporcionan la energía y vitalidad necesaria para hacer frente al día.
  • En cuanto a los lácteos con dos o tres raciones diarias es suficiente. Un vaso de leche con yogures desnatados son el aporte de lácteos diarios óptimos.
  • Por último, mantener una correcta hidratación es muy importante para nuestro día a día. Por ello, es importante tomar 4-6 vasos de agua diarios.
  • Las legumbres deben consumirse de dos a cuatro veces a la semana al igual que los huevos, que se deben consumir de tres o cuatro veces por semana.
  • Otro aspecto de la dieta mediterránea es el consumo de pescado azul al menos dos veces por semana y, moderar el consumo de carne, decantándonos por carnes magras que tienen menores niveles de grasa. Asimismo, debe evitarse el consumo de carne procesada en forma de embutidos o reducir su consumo a ocasiones puntuales
  • Por último debemos limitar o evitar el consumo de azúcares, bollería industria, refrescos azucarados y golosinas que son una fuente de azúcares refinados perjudiciales para la salud.

Por lo tanto, interiorizar hábitos alimenticios propios de la dieta mediterránea nos ayudará a mantener nuestra salud en buen estado y además favorecerá el crecimiento de bacterias intestinales favorables para nuestra flora intestinal.

¡Ponte en marcha este otoño y comienza a cuidar tu alimentación!